Quero Tuiy.

 

 cuenta el de la triste figura, allá en Tuiy, su ciudad:

 

quero Tuiy.

Tuiy,

tu amor es magia y alegría.

Es reír cada día,

es vivir con pasión.

Es tener ilusión.

Quero Tuiy, creyendo en los sueños.

Disfrutando el momento,

Quero Tuiy, ese Tuiy que comparte vida.

Quero ese Tuiy que se comunica no seu día a día.

Quero Tuiy no local, o quero como ese pobo pequeño,

donde uns polos outros, todos nos coñecemos.

Quero ese valor, que une sentimentos.

Quero Tuiy, como unha gran familia capaz,

de que a ninguen lle falte alimento.

Exquisita emoción, que saciaría el hambre del alma y del cuerpo.

Quero un Tuiy honesto, en todo “comercio”.

Covertindo as aventuras e desventuras en experiencias, sin temor a miseria cando unha Pandemia fai que teñamos que pechar a “Tenda”.

Quero Tuiy,

quero un Tuiy que non sufra polas “perdidas”,

mais alá das necesidades que nos sacan da miseria.

Tuiy, pequeña divinidad protectora,

a la que cantan los mas felices servidores.

“una sonrisa al cruzarse fugazmente nuestras miradas,

una sonrisa que llena de alegría todas nuestras almas.

Una sonrisa que deja al descubierto,

el paraíso que lleva dentro.

Su sonrisa me cautivo y pude entrar en su cielo.

Como Beatriz iluminada por los sueños de Dante,

la ciudad engalanada por navidad,

me acerque a ella, y juntos compartimos la Gloria

de todo lo que llevamos dentro.

En el placer de lo puesto,

lo nuestro.

Que alcanza la satisfacción de los hechos.”

eu quero Tuiy, con todas e cada unha das peculiaridades que atesora.

Eu quero a Tuiy, capaz de salvaguardar a todas as persoas.

Feliz navidade. E teñamos fe, de que viran tempos millores.