Tuiy

y cuenta el de la triste figura, allá en Tuiy, su ciudad:

Tuiy.

En las políticas elementales.

En las políticas municipales.

Lobbys de presión locales.

Lobbys de agrupaciones cultuales,

Lobbys de deportistas excepcionales,

Lobbys de comerciantes,

Lobbys de las artes manuales.

Lobbys de las librerías locales.

Lobbys de procesiones celestiales.

-¡arregleme usted esta jardinera! ¡deme usted para esta fiesta! Gritan unos.

-¡mire que buenos somos! Gritan los otros, ¡financien-nos un poco!.

Asociaciones de las más diversas cuestiones. Agrupaciones en los idearios de sus naciones. Que si la ordenación del territorio de cual o tal forma. Que si los honores de cualquier gloria. Que si la cultura que aportan.

Y todos apasionados se lanzan a la arena de los vocablos.

El cuerpo social al completo, que busca soluciones a todo cuanto alcanza su intelecto.

Unos piden por la memoria de lo que fuimos, otros por la memoria de lo que seremos.

Fascinante en todos seus conceptos. A organización dos elementos.

La vida, ese juego del sentir el día a día.

Campañas publicitarias, emocións que saltan, razóns que alcanzan.

Y en los lobbys políticos de todos los partidos, saltan intereses imprevistos.

-la democracia decide por el bien del pueblo. Y si una mayoría demócrata decide que no hay presupuestos, pues se acepta tal cual moción de censura por el bien de la cordura.

Miren, paralicen todo, dejen de organizar la hacienda. Y como liberales que somos, que cada uno recoja el fruto del grano que siembra.

Lobbys de los intereses particulares que militan en algunos partidos de la corporación.

Y cuando no alcanzan, se ahogan en sus lagrimas, tras ese lloro constante de que o entienden su arte.

-pues si, amigo Sancho. Esos que en el ejercicio del poder que ostentan, echan la culpa a los otros, son incapaces de comprender lo que somos, y son peligrosos para la convivencia en paz de unos para con otros.

Se puede ser abnegado y no comprender, pero con humildad te ayudaran en todo lo que emprendas.

 Pero a parte de ser abnegado y no comprender, si uno es arrogante y tiene poder. Prepárense para la lucha, en todos los términos que nuestra naturaleza alcance a comprender.

“todos tenemos un cerebro preparado para sobrevivir”,

“todos estamos programados para vivir en publico”.

Y en la batalla dialéctica que se libra en la plaza publica, en esa plaza que brindan los nuevos medios de comunicación. Lobbys de mala reputación.