Sus almas arderán en el
purgatorio.
Sus espíritus pasaran por
la vida como un espejismo.
Y la razón de lo humano,
Arrastrara siempre el
pasado.
La parábola de las vacas.(nueva
era 3,3-4)
Y tuvo un sueño.
Siete vacas gordas,
Setenta y siete vacas
flacas,
“Siete veces siete”,
vacas medianas.
De las siete vacas
gordas,
Una es espía,
Otra, la revelación
divina,
Una tercera no es
admitida en la justicia,
La cuarta juega a las
cartas,
La anterior a la sexta no
duerme la siesta,
La sexta llena de
misericordia la esperanza,
Y la séptima cambia el
pensamiento de la manada.
De las setenta y siete
vacas flacas cuelgan;
los collares de la Vida.
Unas llevan la Verdad,
Otras portan la Esperanza,
Unas abrazan el Honor,
En otras cuelga la Inteligencia,
Unas pintan el Destino,
Otras guían el Camino.
Unas gobiernan el
sentido.
Unas poseen la Palabra,
Otras el Oído,
Unas guían al Amor,
Otras a la ilusión,
Unas colorean los
pensamientos,
Otras crean cuentos,
Unas viven sueños.
De las vacas que son
siete veces siete,
De ellas no esperéis
nada,
Solo siguen a la cabeza
de la manada.
Que con cualquier
argumento,
Verifican la verdad de la
palabra.
De todas las vacas,
Vigilad bien las gordas
vacas sagradas,
Que de ellas depende el
rumbo de la especie,
A las flacas,
Animadlas a tomar la
palabra.
De de ella brota la esperanza.
A las medianas.
Enseñadlas a pensar.
Para que no salgan en
estampida,
Por una u otra ideología.
En busca de ganarse la
vida.
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